Cientos de familias visitan el “Mirador del Desierto Florido” en el peak del fenómeno natural

Chilquinta y la Municipalidad de Vallenar llaman a proteger este ecosistema único, promoviendo la observación responsable desde un punto diseñado especialmente para apreciar el espectáculo sin dañarlo.

El “Mirador del Desierto Florido”, ubicado a solo 14 kilómetros de Vallenar, se ha convertido en uno de los lugares más visitados de la temporada, recibiendo a cientos de familias y turistas que llegan desde distintos puntos de Chile y del extranjero para disfrutar del colorido paisaje que ofrece el fenómeno natural más emblemático de Atacama.

Situado en una pequeña colina, este mirador ofrece una vista panorámica privilegiada de los cerros y planicies cubiertas de flores rojas, violetas y amarillas, que este año alcanzaron su máximo esplendor. La infraestructura —que incluye zonas de sombra y senderos habilitados— fue diseñada por Chilquinta y entregada a la comunidad como parte de su compromiso ambiental, permitiendo contemplar el paisaje sin afectar el ecosistema.

A comienzos de octubre, Chilquinta y la Municipalidad de Vallenar inauguraron oficialmente la temporada de observación, e hicieron un llamado a la comunidad a proteger el Desierto Florido, evitando conductas que dañen las especies nativas. En las últimas semanas, se han registrado casos de visitantes que han ingresado con vehículos motorizados, pisado flores o recolectado semillas, lo que motivó al municipio a reforzar la fiscalización y emitir partes empadronados a quienes incumplen las normas.

El alcalde de Vallenar, Víctor Isla Lutz, destacó la importancia de usar la infraestructura de observación “Invitamos a que nos vengan a visitar y que hagan un buen uso del Desierto Florido. Hoy contamos con miradores especialmente diseñados, como el del kilómetro 673 de la Ruta 5 Norte, junto a Chilquinta, y otro en el kilómetro 720, donde se puede apreciar la naturaleza en su máximo esplendor con el debido cuidado que merece nuestro desierto”.

Por su parte, Alexis Palacios, subgerente de Asuntos Externos de Chilquinta, valoró el éxito de la iniciativa “Nos alegra muchísimo el impacto que ha tenido el Mirador del Desierto Florido. Muchos visitantes nos han agradecido por contar con un espacio acondicionado para la observación, que además permite reducir el daño a la naturaleza. Ese era precisamente nuestro objetivo”.

Durante octubre se han desarrollado diversas actividades para fomentar el cuidado y la contemplación del paisaje, entre ellas una corrida recreativa por senderos autorizados, que tuvo como punto de partida y meta el mismo mirador.

Desde Vallenar, se debe tomar la Ruta 5 Norte en dirección a Copiapó. A la altura del kilómetro 673, se ingresa por la Ruta C-467 hacia el sector de Chehueque. Antes de llegar a la línea férrea, se encuentra el camino vehicular que da acceso al mirador, visible desde la carretera sobre una pequeña colina. El recorrido no supera los 20 minutos, convirtiéndolo en un paseo cómodo y accesible para toda la familia.