Actividad reunió a la comunidad en torno al avistamiento de aves y la protección del ecosistema, con la participación de la Universidad de Atacama, el Ministerio del Medio Ambiente y la ROC.
Con una alta participación ciudadana se realizó una nueva jornada de Monitoreo Comunitario de Avifauna en el Santuario de la Naturaleza Humedal Desembocadura Río Copiapó. La iniciativa, organizada en el marco del proyecto financiado por el Fondo de Protección Ambiental (FPA) del Ministerio del Medio Ambiente, fue ejecutada por la Universidad de Atacama con el objetivo de fomentar la conservación del humedal mediante el conocimiento y la acción comunitaria.
Durante la actividad, vecinos y vecinas participaron en una enriquecedora experiencia de observación de aves, guiados por la Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile (ROC), quienes enseñaron técnicas de identificación y registro de avifauna, además de destacar el rol clave que cumplen los humedales costeros para especies migratorias.
En el humedal se han registrado hasta ahora 125 especies de aves. En esta jornada, la ROC logró identificar 33, entre ellas el sietecolores, garza grande, garza cuca, cisnes coscorobas, rayadores y huairavos juveniles, evidenciando un ecosistema diverso y activo en procesos de nidificación.
La actividad incluyó una limpieza del sector junto al municipio de Caldera y contó con stands informativos de la Universidad de Atacama, la Seremi del Medio Ambiente de Atacama y la ROC. También se promovió el uso de plataformas como eBird, herramienta de ciencia ciudadana que permite registrar avistamientos y apoyar la conservación mediante datos abiertos.
La seremi del Medio Ambiente, Natalia Penroz, destacó: “El trabajo colaborativo entre instituciones, organizaciones y la ciudadanía es clave para avanzar en la conservación de nuestros humedales, que son verdaderos refugios de biodiversidad y fundamentales para enfrentar la crisis climática”.
Por su parte, Solange Vargas, académica de la Universidad de Atacama y coordinadora del proyecto, valoró el impacto del monitoreo comunitario: “Este tipo de actividades fortalecen la educación ambiental y promueven el involucramiento de la comunidad local en la protección de estos valiosos ecosistemas”.