La medida, parte de la Estrategia Nacional del Litio, busca resguardar ecosistemas altoandinos, proteger humedales frágiles y cumplir la meta de conservar al menos el 30% de estos entornos para 2030.
El Consejo de Ministros para la Sustentabilidad y el Cambio Climático aprobó la creación de las seis primeras áreas protegidas que conformarán la Red de Salares Protegidos, una pieza central de la Estrategia Nacional del Litio. Según informó el Gobierno, el objetivo es “resguardar la riqueza natural del país y cumplir con el compromiso de proteger al menos el 30% de estos ecosistemas al año 2030”.
Las nuevas unidades de conservación se ubican íntegramente en la Región de Atacama, abarcando sectores cordilleranos y precordilleranos de las provincias de Copiapó, Chañaral y Huasco, todos ellos ecosistemas salinos de alto valor ecológico e hídrico. En conjunto, integran diez salares y lagunas altoandinas agrupadas en seis figuras de protección:
Parque Nacional Lagunas Bravas – Comuna de Copiapó (Provincia de Copiapó):
Incluye el Salar de Maricunga y el complejo lacustre asociado. Es una de las zonas altoandinas más relevantes por su biodiversidad, presencia de flamencos y su rol como humedal estratégico en la cuenca del río Copiapó.
Reserva de Región Virgen Lagunas Collas – Comunas de Copiapó y Tierra Amarilla (Provincia de Copiapó):
Comprende lagunas y vegas cordilleranas utilizadas históricamente por las comunidades Colla. Se ubica en la ruta hacia el Paso San Francisco, en una zona clave de corredores biológicos altoandinos.
Reserva Nacional Salar de Pedernales – Comuna de Diego de Almagro (Provincia de Chañaral):
Protege el Salar de Pedernales, uno de los sistemas salinos más icónicos del altiplano atacameño. Su geomorfología, fauna especializada y presencia de aguas subterráneas lo convierten en un ecosistema altamente sensible.
Reserva de Región Virgen Pisacas – Comuna de Alto del Carmen (Provincia de Huasco):
Incluye lagunas, vegas y humedales del sector de Pisacas, en la cordillera del valle del Tránsito. Es una zona utilizada para ganadería de altura y tránsito ancestral, con un importante valor cultural y territorial.
Parque Nacional Salar de Gorbea – Comuna de Diego de Almagro (Provincia de Chañaral):
Abarca el Salar de Gorbea, caracterizado por sus planicies salinas extensas, su fauna adaptada a condiciones extremas y su relevancia para la conectividad ecológica entre las cuencas de Pedernales y Maricunga.
Parque Nacional Salar de Las Parinas – Comuna de Copiapó (Provincia de Copiapó):
Comprende un conjunto de salares y lagunas cordilleranas cercanas a la frontera con Argentina, integradas a un corredor ecológico altoandino de alto valor científico y paisajístico.
Desde el Ejecutivo subrayaron que los salares altoandinos “son humedales extremadamente frágiles y esenciales para la biodiversidad”, y que su protección es “vital” por su contribución a la provisión de agua, el equilibrio ecológico, el desarrollo científico y el turismo de naturaleza.
La ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, destacó que esta política demuestra que es posible “compatibilizar estrategias de desarrollo con el cuidado de la riqueza natural del país”, relevando la importancia de avanzar en protección efectiva en zonas donde también existen actividades económicas sensibles.
La Red de Salares Protegidos contempla en total la incorporación de 26 ecosistemas salinos, lo que elevará la superficie bajo protección desde el 8% actual hasta un 32%. Esta expansión está alineada con los objetivos del Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal, que impulsa la protección del 30% de ecosistemas representativos al 2030.
El proceso de creación de estas áreas incluyó una consulta pública y una consulta indígena, en la cual las comunidades Colla “concluyeron con éxito la etapa de diálogo sobre la creación de estas seis nuevas áreas”, según informó el Gobierno.
Tras la aprobación del Consejo de Ministros, el Decreto Supremo que formaliza estas unidades quedará listo para la firma del Presidente Gabriel Boric y luego deberá ingresar a la Contraloría General de la República para su toma de razón.