La intervención, que supera los $3.600 millones, considera renovación de pavimento, mejoras en seguridad vial y nueva demarcación para optimizar la conexión entre Copiapó y Chañaral.
La Dirección de Vialidad del Ministerio de Obras Públicas avanza en la ejecución de obras de conservación periódica en la Ruta C-17, específicamente entre los kilómetros 15 y 30 de la Provincia de Copiapó. La intervención, que forma parte del programa regional de conservación vial, contempla una inversión sectorial de $3.669.910.457 y busca mejorar la seguridad, la calidad de viaje y las condiciones operativas de una de las rutas más relevantes para el tránsito entre las provincias de Copiapó y Chañaral.
La Ruta C-17 es un camino bidireccional altamente transitado y fundamental para el desarrollo productivo, el transporte y los desplazamientos cotidianos del territorio. Actualmente su calzada cuenta con 3,5 metros de ancho por sentido, bermas de 1,5 metros en concreto asfáltico y obras de saneamiento longitudinal y transversal en distintos tramos. Mantener esta vía en condiciones óptimas es clave para asegurar desplazamientos seguros y eficientes, por lo que el proyecto considera mejoras integrales en su estructura y señalización.
El seremi de Obras Públicas de Atacama, Mauricio Guaita Juantok, subrayó el impacto directo que esta intervención tendrá en la movilidad regional. “Como Gobierno estamos trabajando para que las familias de Atacama cuenten con rutas en buen estado, seguras y a la altura de las necesidades de nuestra región. Mantener y mejorar nuestra red vial no es solo una tarea técnica; es una decisión política que impacta directamente en la calidad de vida, la seguridad y el desarrollo de nuestros territorios”, señaló.
Las obras incluyen el retiro de 3 centímetros del pavimento existente para la posterior aplicación de una capa adherente y la instalación de una nueva carpeta de concreto asfáltico de 5 centímetros. Este proceso permitirá prolongar la vida útil del camino, mejorar la adherencia vehicular y ofrecer una experiencia de viaje más confortable. Se mantendrán los bombeos, peraltes y parámetros geométricos actuales, sin modificar el trazado original, lo que evita expropiaciones y asegura que todos los trabajos se realicen dentro de la faja fiscal sin afectar predios particulares.
Posteriormente, se ejecutará una nueva demarcación central y lateral, junto con la incorporación de tachas reflectantes para reforzar la visibilidad nocturna. En materia de seguridad vial, el proyecto considera la reposición total de señales verticales deterioradas y la instalación de canalizadores en sectores determinados, elevando las condiciones de seguridad tanto para conductores como para peatones. La velocidad de proyecto establecida es de 80 km/h, acorde a las características del camino.
La iniciativa tiene una duración programada de 12 meses, periodo en el cual la empresa contratista deberá mantener presencia permanente en la ruta para asegurar la continuidad de las faenas y atender oportunamente cualquier requerimiento operativo que surja durante la ejecución.
Finalmente, el seremi MOP destacó el efecto que estas mejoras tendrán para quienes utilizan la ruta en su vida diaria. “Estamos realizando mejoras que las personas van a notar en su experiencia de viaje: un camino más seguro, con mejor pavimento, nueva señalización y mayor visibilidad. La Ruta C-17 es clave para la conexión entre Copiapó, Inca de Oro y Diego de Almagro, y por eso estamos invirtiendo en mantenerla en las mejores condiciones posibles. Nuestro compromiso es seguir recuperando y conservando la red vial de Atacama para que las familias transiten con mayor tranquilidad”, afirmó.