Columna de opinión | Huasco en la encrucijada

Juan José Ronsecco
Presidente de CORPROA

La Provincia del Huasco atraviesa uno de sus momentos más críticos. Una tasa de desempleo superior al 13% no es solo una cifra en un informe: representa la angustia cotidiana de miles de familias que ven diluirse sus expectativas de estabilidad y desarrollo.

En este escenario complejo y urgente, han surgido propuestas que reavivan el debate sobre el equilibrio entre protección ambiental y reactivación económica. Entre ellas, la idea de declarar a toda la provincia como zona de latencia ambiental, ampliando considerablemente su delimitación actual, ha despertado inquietudes profundas.

Aunque el resguardo del medio ambiente es una causa transversal y necesaria, preocupa que esta iniciativa —según plantean diversos actores locales— no esté acompañada de una justificación técnica y cuantitativa robusta. El temor no es menor: una declaración de este tipo podría restringir nuevas inversiones y paralizar proyectos clave para la zona, afectando directamente a la matriz productiva y a la ya limitada generación de empleo. Incluso se alerta sobre un efecto expansivo que impactaría a comunas limítrofes como La Higuera, en la región de Coquimbo.

Crece la percepción de que algunas decisiones ambientales podrían estar siendo impulsadas con criterios que exceden el análisis técnico riguroso. En ese contexto, resulta indispensable actuar con prudencia y firmeza. La Provincia de Huasco no puede transformarse en el terreno de ensayo de agendas políticas que, lejos de contribuir al bienestar local, profundicen las brechas sociales y económicas existentes.

La solución no está en renunciar a los compromisos ambientales, sino en garantizar que estos se construyan desde el diálogo, la evidencia técnica y la visión de largo plazo. Se requiere una mirada equilibrada que permita avanzar en sostenibilidad sin poner en riesgo el progreso y el trabajo digno para sus habitantes.

El llamado es claro: evitar que Huasco quede atrapado en una encrucijada entre la parálisis productiva y el abandono. Solo a través de la colaboración pública y privada, la búsqueda de consensos reales y la priorización de los intereses de las personas y el territorio, podremos trazar una ruta hacia la prosperidad y la estabilidad laboral que la provincia tanto necesita.

FUENTE REDIMIN