Las parlamentarias de oposición advierten que la medida del Instituto de Salud Pública afectará el acceso y la autonomía de las mujeres, especialmente de sectores con menos recursos.
Las diputadas Sofía Cid (Partido Republicano) y María Luisa Cordero (independiente-RN) manifestaron su rechazo a la reciente disposición del Instituto de Salud Pública (ISP), que obliga a presentar una receta médica para adquirir pastillas anticonceptivas en farmacias. Según argumentan, esta normativa representa una barrera que puede limitar el acceso oportuno y continuo a estos medicamentos, afectando directamente la autonomía y salud reproductiva de las mujeres.
Ambas legisladoras oficiaron al Ministerio de Salud para que revise la medida y evalúe alternativas que permitan asegurar el acceso sin restricciones a los anticonceptivos. En particular, alertaron sobre el impacto económico que puede tener esta exigencia en mujeres de menores ingresos, quienes deberán asumir el costo adicional de una consulta médica, enfrentar mayores tiempos de espera y eventualmente interrumpir sus tratamientos.
“Esta medida afecta con especial gravedad a quienes enfrentan dificultades económicas. Para ellas, la exigencia de una consulta médica adicional implica costos innecesarios, largos tiempos de espera y posible interrupción en su tratamiento anticonceptivo”, sostuvo la diputada Cordero, integrante de la Comisión de Salud.
Por su parte, la diputada Cid enfatizó que “la salud pública debe promover el acceso sin restricciones a los anticonceptivos, garantizando que las mujeres puedan ejercer sus derechos en condiciones de igualdad. La implementación de medidas que complican su acceso no solo vulnera derechos fundamentales, sino que también genera desigualdades”.
Ambas llamaron al Ministerio de Salud a priorizar una política sanitaria más inclusiva, equitativa y efectiva, que resguarde los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres sin imponer trabas administrativas.