El detenido fue identificado como Diego Soto Montero, de 25 años. La PDI incautó restos óseos, ropa y un skate, y lo capturó tras ser trasladado a un centro psiquiátrico con lesiones autoinfligidas.
La Policía de Investigaciones (PDI) detuvo este miércoles a Diego Soto Montero, de 25 años, señalado como autor de la profanación de tumbas en el Cementerio General de Santiago, hecho que incluyó la sustracción de un cráneo humano y daños al mausoleo del expresidente Salvador Allende.
El caso salió a la luz luego de que un video viralizado en redes sociales mostrara a un grupo de personas violando sepulturas, entre ellas la de Ernestina Pérez, una de las primeras mujeres médico de Chile y Sudamérica. En las imágenes, Soto Montero aparece portando un cráneo, objeto que fue posteriormente hallado en su domicilio, ubicado en la comuna de Recoleta.
Durante el allanamiento, la PDI también incautó otras osamentas, vestimentas y un skate, elementos que coinciden con los registrados en el video. Según el subcomisario Nicolás Vázquez, de la Brigada de Investigación Criminal, “las osamentas serán periciadas para determinar si son de origen humano o animal”.
Las diligencias policiales se realizaron en avenida La Serena con Río Blanco. Aunque el sospechoso no estaba en su domicilio al momento del operativo, fue ubicado más tarde en el Instituto Psiquiátrico Dr. José Horwitz Barak, donde había sido trasladado por una vecina tras presentar lesiones autoinfligidas. Fue en dicho recinto donde se concretó su detención por orden del Tercer Juzgado de Garantía de Santiago.
La madre y la tía del imputado, presentes en la vivienda durante el allanamiento, fueron llevadas a declarar en calidad de testigos, sin que se registraran más detenciones.
Actualmente, Soto Montero es el único formalmente identificado como autor de los hechos, aunque la PDI indicó que hay al menos cinco personas más bajo investigación por su presunta participación. “Las diligencias continúan para identificar a los acompañantes”, señaló el subcomisario.
El sospechoso no estaría registrado como paciente del centro psiquiátrico, pero su condición médica ha retrasado su comparecencia ante tribunales.