Además la jefa de la cartera de Medio Ambiente, se refirió al último informe del IPCC y la «reactivación verde» en nuestro país.
Tras la reciente aprobación del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto minero portuario Dominga, por parte de la Comisión de Evaluación Ambiental de la Región de Coquimbo, algunos presidenciables de oposición se manifestaron en contra de la medida.
«Afecta de manera irreversible una de las zonas de mayor valor ecológico del país», aseveró la precandidata de la DC, Yasna Provoste. «Chile Vamos y la derecha están haciendo un daño irreparable al permitir que continúe el proyecto de minera Dominga», acusó por su parte, el presidenciable de Convergencia Social, Gabriel Boric. En tanto, la precandidata del PS, Paula Narváez, enfatizó en que «esto no es progreso, es el comienzo de una nueva zona de sacrificio» y su par del Partido Radical, Carlos Maldonado, que «Piñera, a través de seremis, aprueba Dominga, burlando descentralización y la voluntad ciudadana que eligió un Gobernadora Regional que ha expresado serios reparos al proyecto».
Ante eso, en entrevista con EmolTV, la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, comentó que «toda autoridad tiene que ser responsable de que tengamos una institucionalidad, no podemos funcionar como Julio César que alguien levanta o baja la mano y depende de una persona justamente la institucionalidad de un país. Fortalezcamos la institucionalidad ambiental».
Agregó que «tengamos, de parte de todos los candidatos, un respeto por la institucionalidad, es algo que los países necesitan para poder funcionar en paz y para garantizar el desarrollo sustentable en nuestro país. Ese es el llamado a todos los candidatos, a respetar y fortalecer la institucionalidad ambiental del país».
Por otro lado, dado que «Chile cuenta con una institucionalidad ambiental establecida, con procesos que son regulados y con tribunales ambientales especializados, como ministra de Medio Ambiente «no me puedo referir». No obstante, destacó que «lo que necesitamos para el país es un desarrollo que sea sustentable».
Lo que implica, «que los proyectos tienen que cumplir los requerimientos para que sean realizables de manera sustentable». Es eso, lo que a su juicio, la Evaluación de Impacto Ambiental tiene que garantizar a todos y señaló que «el llamado es a que las instituciones funcionen, que en las instancias de reclamación se presenten todas las inquietudes se tienen en relación a determinado proyecto, y que la justicia ponga estos elementos en consideración para su evaluación».
Adicionalmente, consultada sobre la posibilidad de que le toque presidir el comité de ministros para evaluarlo, dijo que «no lo sé, es efectivamente un proceso en curso, pero sí destacar que necesitamos una institucionalidad ambiental robusta que de garantías a todos los actores con normas claras para todos y garantice el desarrollo de actividades en nuestro país sea realmente sostenible y cuide el medioambiente».
Conclusiones IPCC
Por otro lado, en el contexto del último informe elaborado por el Grupo Intergubernamental de Expertos Sobre el Cambio Climático (IPCC), en el que una de sus conclusiones reveló que el calentamiento global es peor y va más rápido de lo que se esperaba, la ministra Schmidt señaló que «es un verdadero código rojo» y «establece que es fruto del comportamiento humano».
«El llamado es firme y muy claro. Evidentemente, el llamado a los países pero con particular foco en los grandes emisores, es a la reducción de emisiones de manera rápida, contundente y permanente en el tiempo», dijo.
Por lo mismo, hizo énfasis en que «tenemos que tomar todas las medidas dentro de las políticas públicas para que todas las acciones estén preparadas de manera de disminuir los daños que el cambio climático produce en la población». Como ejemplo, mencionó incendios forestales, incrementos en la temperatura y aluviones. Adicionalmente, se refirió a una «reactivación verde» y cómo se puede llevar a cabo en un contexto donde existe una crisis hídrica y una mega sequía: «Si bien el plan de descarbonización de Chile y la transformación a las energías limpias están teniendo un liderazgo internacional y es fuertemente reconocido en esta materia, también tiene que hacerse cargo de los impactos que nos genera el cambio climático».
«La reactivación verde de Chile, en el sentido de que tenemos todas nuestras inversiones dirigidas del 30% específicamente a proyectos de adaptación al cambio climático y que tiene que ver con la gestión del agua, nos permiten salir de una situación que podría impactarnos severamente, como tener que tener una restricción hídrica o una restricción energética, a pesar de la enorme sequía que estamos viviendo fruto del calentamiento global, no vamos a tener esas restricciones energéticas y nuestro plan de descarbonización se mantiene absolutamente afirme, de hecho el 65% de todas las centrales a carbón de nuestro país van a estar cerradas al 2025», agregó.