Atacama se llena de colores: el Desierto Florido vuelve a brillar este 2025

El fenómeno natural ya se aprecia en sectores costeros e interiores de la región, con mantos de flores que cubren cerros, quebradas y planicies.

El Desierto Florido regresó este 2025 a la Región de Atacama, desplegando un espectáculo único de colores y biodiversidad que sorprende a turistas, fotógrafos y habitantes locales.

Gracias a las abundantes lluvias de invierno y a las bajas temperaturas, miles de semillas y bulbos latentes lograron germinar, dando vida a un paisaje excepcional. En la región ya es posible observar flores en sectores de la costa de Caldera y Huasco, así como en los interiores de Vallenar y Copiapó, donde se extienden grandes mantos que tiñen de tonos rosados y blancos la aridez del desierto.

Entre las especies que florecen destacan la pata de guanaco, la malva de campo y el suspiro, además de geófitas como las añañucas, lirios de campo, cebollines y la garra de león. Mientras en la franja costera predomina la diversidad en espacios reducidos, hacia el interior se forman verdaderas alfombras naturales que cubren kilómetros de extensión.

El Desierto Florido en Atacama es considerado un patrimonio natural de gran valor científico, turístico y cultural. Se trata de un ecosistema frágil, cuya existencia depende de condiciones climáticas excepcionales y que cada cierto tiempo regala a la región uno de los espectáculos más reconocidos a nivel mundial.