Tragedia en El Teniente: pérdidas para Codelco alcanzarían los US$10 millones diarios

La paralización parcial de la mina subterránea más grande del mundo, tras el derrumbe que dejó seis trabajadores fallecidos, mantiene en vilo a la estatal mientras se investigan las causas del accidente.

Codelco enfrenta un complejo escenario tras la tragedia ocurrida el jueves en la división El Teniente, donde seis mineros perdieron la vida a raíz de un derrumbe al interior de la mina. A raíz del accidente, la operación subterránea de la división fue suspendida por instrucción del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), mientras se desarrollan investigaciones técnicas y laborales para determinar las causas y responsabilidades del hecho.

Aunque la compañía aún no ha podido cuantificar oficialmente el impacto económico de la paralización, estimaciones recogidas por medios especializados indican que las pérdidas podrían alcanzar entre 8 y 10 millones de dólares diarios.

El Teniente, ubicada en la comuna de Machalí, región de O’Higgins, es la mayor mina subterránea de cobre del mundo, con más de 4.500 kilómetros de túneles y una producción de 356 mil toneladas métricas de cobre fino en 2024. La dotación propia supera los 3.900 trabajadores, sin considerar personal externo.

Actualmente, sólo el 10% de la operación —correspondiente a la explotación a cielo abierto o rajo— continúa funcionando. El 90% restante permanece detenido, a la espera de que nuevas evaluaciones técnicas determinen si existen condiciones seguras para retomar gradualmente las faenas.

El accidente, de acuerdo con las primeras versiones, se habría originado por un sismo inducido durante una operación de perforación en capas profundas del yacimiento. Cinco de los seis trabajadores quedaron sepultados y sus cuerpos fueron recuperados tras tres días de intensas labores de rescate. La emergencia activó los protocolos internos de Codelco, y las investigaciones están siendo conducidas por Sernageomin y la Dirección del Trabajo.

La estatal ha declarado que sólo reanudará sus operaciones subterráneas cuando existan garantías plenas de seguridad. Además, se ha anunciado la contratación de una auditoría internacional para revisar los procedimientos operativos y establecer las posibles fallas que desencadenaron la tragedia.