La audiencia permitió revisar los avances en las medidas de reparación y compensación por el daño ambiental al acuífero del Copiapó. El punto crítico: el destino final del agua comprometida para el Parque Kaukari.
En una audiencia especial, el Primer Tribunal Ambiental constató el estado de cumplimiento del acuerdo de conciliación suscrito en 2021 entre el Consejo de Defensa del Estado (CDE) y la Compañía Contractual Minera Candelaria, en el marco de una demanda por daño ambiental al acuífero del río Copiapó.
El tribunal evaluó el segundo informe bianual presentado por las partes, el cual fue acompañado por antecedentes técnicos y un pronunciamiento clave de la Dirección General de Aguas (DGA). En su revisión, el tribunal identificó avances, pero también discrepancias en torno al cumplimiento de una de las principales medidas de reparación: la conducción de agua al río Copiapó y su llegada efectiva al Parque Kaukari.
Según el informe de la DGA, el agua descargada por la minera se infiltra antes de alcanzar el parque, quedando a unos 500 metros de distancia. Por ello, el organismo propuso contabilizar el volumen de agua comprometido desde el punto donde realmente llega al parque, y no desde la descarga inicial.
Durante la audiencia, el abogado del CDE, Nicolás Escobar, explicó que si bien Minera Candelaria ha realizado las descargas, la medida no se estaba cumpliendo en su objetivo final. “La DGA se percató que el agua no estaba llegando al parque y construyó un canalón para operativizar el objetivo del acuerdo. En definitiva, no se trata solo de descargar agua, sino de que efectivamente llegue al sector comprometido”, afirmó.
Minera Candelaria, en tanto, rechazó esta interpretación y defendió haber cumplido con todos los compromisos establecidos: construcción de infraestructura, obtención de permisos, descarga en el punto acordado y respaldo notarial de los volúmenes vertidos. Atribuyó la infiltración anticipada a obras ejecutadas por terceros en el cauce del río, particularmente un badén construido por el Serviu que impediría el flujo hacia el Parque Kaukari.
“El problema no lo causamos nosotros. Cumplimos con todo lo que se nos pidió. El agua se topa con este terraplén y no siguió fluyendo. Nos sorprende que hoy se nos descuente agua que hemos descargado religiosamente”, sostuvo el abogado de la empresa, Javier Vergara.
La demanda del CDE contra Minera Candelaria fue presentada en 2019, por supuesta sobreexplotación del acuífero y otros incumplimientos ambientales. La conciliación, aprobada en 2021, incluyó medidas de investigación, reparación y gobernanza ambiental, como estudios de servicios ecosistémicos, donación de derechos de agua y acciones de fortalecimiento institucional.
Uno de los compromisos centrales fue la conducción de hasta 100 litros por segundo al río Copiapó, con descargas ubicadas a dos kilómetros del Parque Kaukari, esperando lograr una infiltración superior a los 6 millones de metros cúbicos en un plazo de 10 a 15 años.
Tras esta audiencia de seguimiento, el Primer Tribunal Ambiental deberá analizar los antecedentes para determinar el cumplimiento efectivo del acuerdo. “El seguimiento de sentencias y conciliaciones es fundamental para asegurar la implementación real y concreta de las medidas ambientales”, sostuvo el ministro Alamiro Alfaro.
La causa D-4-2019 sigue abierta a la espera de nuevas determinaciones judiciales.