Aguas Chañar valora iniciativa de autoridades locales por evitar alza en la tarifa

La planta desaladora de Caldera no generará utilidades a la empresa sanitaria, ya que es una inversión del Estado y sus costos operacionales son definidos por quien la construye.

La planta desaladora de Caldera -un antiguo anhelo de la comunidad para contar con un suministro robusto y de calidad en agua potable- está siendo construida y financiada en su totalidad por el Estado de Chile, a su costo. Así, Aguas Chañar no cobrará ni un solo peso o beneficio por ella cuando entre en operaciones -se estima- a principios de 2021.

Sobre una supuesta alza en las cuentas de un 15%, anunciada por la SISS, correspondería exclusivamente a los costos directos que significa operar y mantener esta planta desaladora -esto es, energía, insumos y sueldos del personal para una operación de gran envergadura como esta-, nuevamente, sin ninguna ganancia para nuestra empresa. Estos montos son definidos por quien la construye y de momento la empresa sanitaria no tiene una relación directa con la desaladora, ya que se encuentra en construcción.

“Consideramos que un alza, por justificada que sea, es inadecuada en este momento y entendemos que la SISS y el Gobierno Regional se encuentran evaluando diferentes alternativas para evitar este cobro para la población de las comunas de Copiapó, Tierra Amarilla, Caldera y Chañaral”.

Aguas Chañar manifiesta su entera disposición para colaborar a encontrar una solución que evite un malestar a las familias que atendemos, a través de una fórmula diferente para cubrir los costos necesarios para operar la futura planta desaladora.