Los Humedales Costeros de Atacama son priorizados para conservar su valiosa biodiversidad

Son extensiones de agua de régimen natural o artificial, permanentes o temporales, de aguas estancadas o corrientes, dulces o saladas, ubicadas en el desierto más árido del mundo.

Un extenso recorrido por los humedales costeros realizó un equipo de profesionales de la Seremi del Medio Ambiente de la Región de Atacama junto a la ONG CECPAN (Centro de estudios y conservación del patrimonio natural), con la finalidad de observar la variada gama de avifauna y biodiversidad que existe en estos parajes, ubicados en el desierto más árido del mundo.

El recorrido se inició en el humedal de la desembocadura del río Copiapó, ubicado en el sector de Puerto Viejo y continuó en el humedal costero de Totoral, donde el equipo multisectorial de la Seremi trabaja para fundamentar la postulación de este humedal como Santuario de la Naturaleza, debido a la riqueza biológica que presenta y por ser parte de una ruta de humedales costeros del Norte Chico.

Del mismo modo se propone el Humedal de Carrizal Bajo, que cuenta con 57 hectáreas, y el de la desembocadura del Rio Huasco, que tiene 451 hectáreas. Se está trabajando para que ambos sean declarados Santuario de la Naturaleza, un tipo de área protegida reconocida por el Estado.

El Seremi de Medio Ambiente, Guillermo Ready afirmó que “los tres humedales en la Región de Atacama son ecosistemas indispensables por los beneficios o “servicios ecosistémicos” que brindan a la humanidad y a la comunidad de estos sectores, desde la provisión de agua dulce, alimentos, conservación de la biodiversidad, hasta el control de crecidas de agua, recarga de aguas subterráneas y mitigación de los efectos del cambio climático”.

EL Seremi Ready agregó que “son ecosistemas altamente vulnerables, particularmente frente a factores de amenaza como las prácticas no sustentables y el cambio climático. Los humedales costeros, se encuentran en una condición crítica; hay una disminución del recurso hídrico, detectándose pérdida o disminución de la población de especies nativas y de anfibios, por lo que es imprescindible protegerlos. Debido a esto, es que la protección de estos tres humedales está incorporada en el Plan Nacional de Protección de humedales 2018-2020 del Ministerio del Medio Ambiente y el Plan Atacama, del Gobierno Regional”